Grupo Adecco, empresa líder mundial en soluciones de Recursos Humanos, presenta un panorama general de la situación laboral de las mujeres ecuatorianas, a propósito de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer. En su análisis, la firma sitúa a Ecuador dentro de la media de países latinoamericanos en la que, según datos de la Organización de Naciones Unidas (ONU), la participación laboral del universo total de mujeres en capacidad para desempeñar un trabajo remunerado es de apenas el 56.4%, frente al casi 85% para el caso de los hombres.
En la actualidad, el camino por la equidad de género se sigue construyendo, pero pese a ello las empresas siguen inclinando la balanza hacia los hombres, especialmente para los cargos directivos. Estadísticas desarrolladas por Adecco, muestran que, en los últimos 6 meses, solo el 36% de los procesos de selección a nivel gerencial fueron ocupados por una mujer. Esto guarda concordancia con un estudio realizado en 2017 por la Consultora Ipsos Ibid que arrojó que en Ecuador tan solo 1 de cada 10 gerencias generales es ocupada por una mujer.
Viviana Rodríguez, Gerente Professional Adecco Ecuador, considera que, a pesar de que históricamente las mujeres han sido apartadas de muchos espacios, en los últimos años su inserción laboral ha ido creciendo. Resalta que, aunque las oportunidades siguen siendo desiguales, las cifras empiezan a equilibrarse y cada vez es más frecuente que las mujeres ocupen cargos asociados tradicionalmente, como propios del género masculino.
En cuanto a salarios, Rodríguez señala que contrario a tener una asociación directa al género, este indicador viene determinada en mayor medida por el nivel de estudios y experiencia del candidato. No obstante, indicó que es una realidad que para las mujeres cabeza de hogar desarrollar plenamente sus capacidades se dificulta, y en muchos otros casos, la mujer misma opta por abandonar un alto cargo para procurar un equilibrio entre su vida familiar y profesional.
Sobre el mercado laboral ecuatoriano, desde hace 10 años, existe una corriente de transformación en beneficio de la equidad de género. Un ejemplo de ello es la Ley por la no discriminación en la selección de personal. En este contexto, si bien la norma ha logrado que varias empresas no sesguen su decisión en función del estado civil o las cargas familiares de una solicitante; no deja de tratarse de una inclusión que tiene que ver más con lo legal que con lo cultural. En muchas ocasiones, la realidad es que, a la hora de la selección, la contratación de una mujer debe luchar con estigmas relacionados con: ausencias por maternidad, permisos para situaciones relacionadas con los hijos, embarazos, entre otros.
Con este breve análisis, la especialista de Adecco presenta un escenario laboral para las mujeres, con varios desafíos por superar. Sin embargo, señala que la meta estaría cercana gracias a la implementación, cada vez más frecuente, de reglamentos y políticas más claras para el tratamiento del talento humano en las empresas. La tarea restante sería, agrega Viviana Rodríguez, impulsar de manera paralela un cambio de mentalidad social hacia una cultura de participación en igualdad de condiciones para construir la verdadera equidad.